Mensajes recibidos por Eileen Caddy
4 de noviembre
Mantén tus ojos abiertos y estate siempre alerta. Contempla Mi mano en todo y da siempre gracias. Puedes perder muchísimo de lo que esté delante de ti, y aun dentro de ti si no estás consciente. Muchas almas pasan por la vida sin ver las maravillas que las rodean, sin ver los milagros de la naturaleza, y de esa manera pierden los milagros de la vida. Cuando seas consciente de la belleza, de la armonía, de la paz y de la serenidad que esconden las cosas pequeñas que te rodean, verás cómo crece esa conciencia hasta que toda la vida se convierte en una maravilla y andes por ella como un niño, con los ojos muy abiertos ante todo lo que ocurre. No habrá ni un solo momento de aburrimiento en tu vida. No darás nada por hecho sino que, antes bien, darás gracias por todo. La gratitud mantiene abierta la puerta de par en par para que tengan cabida cada vez más maravillas en tu vida; así pues, nunca dejes de dar gracias.
5 de noviembre
Acepta tu unidad con toda la vida; acepta tu Unidad conmigo. No la rechaces, creyendo que eres indigna de aceptar nuestra Unidad. Esa impresión de ser indignos es lo que separa a los individuos de Mí, su creador.
Durante muchísimo tiempo se ha dicho a las personas que son unos pecadores miserables y que no merecen caminar y andar conmigo. Hace ya demasiado tiempo que se han separado de Mí, hasta que han dejado de conocerme y ya no se dan cuenta de que YO ESTOY en ellos. Destierra ya de ti esas falsas concepciones acerca de Mí. YO SOY amor. YO SOY en tu interior. Acepta nuestra Unidad con asombro y alegría. Acéptala de la misma forma que una criatura pequeña, y no pierdas el tiempo intentando entenderlo con la mente. Si pretendes acercarte a esta vida de una manera intelectual, estás perdiendo el tiempo y dejando de ver su sencillez. Mis caminos son muy simples; deja de hacer que a ti te resulten complicados.
6 de noviembre
Estos no son tiempos ordinarios. Contempla el despliegue de Mi vasto y glorioso plan. Ahora es el momento de que ocurran los cambios más maravillosos, así que estate preparado para cualquier cosa en todo momento. No existe nada casual o fortuito respecto a las almas que están siendo atraídas entre sí en este momento para el inmenso trabajo que aguarda. Se está desplegando un plan muy definido; camina a la par que él. No albergues preocupación alguna; disipa todo temor. Reconoce Mi mano en todo, contempla su perfección y agradécelo eternamente. Mantente preparado y estate dispuesto a aceptar tus responsabilidades. Esta vida no es para los haraganes ni para las almas que tienen miedo de asumir responsabilidades. La Nueva Era pide fuerza, valentía y dedicación, así como una fe y una creencia inquebrantables. Es una aventura maravillosa, y por lo tanto se requiere espíritu de aventura para entrar en ella y formar parte de la misma. Camina al compás de todo lo que está sucediendo, de forma callada y con paz, sin la menor tensión, pues todo está muy, muy bien.
7 de noviembre
¿Has encontrado de qué forma puedes contribuir al conjunto? ¿Puedes sentirte fundiéndote con él, o te da la impresión de estar separado, mirando hacia dentro y preguntándote cuál es tu sitio? ¿Por qué no entrar dentro y, al hacerlo, encontrar ese lugar especial con mayor rapidez? Una vez te sientas parte del conjunto, querrás dar lo mejor de ti. Ese proceso es similar a un reloj con sus múltiples partes. Todas las partes son necesarias para que el reloj marque el tiempo de forma correcta. Cuando cada una de las partes está en su sitio, desempeñando su función específica, se logra la mayor precisión para marcar el tiempo. Todas las almas anhelan ser queridas, ser necesitadas. Cuando sientes que se te necesita comienzas a crecer, a florecer, a dar frutos y a ofrecer lo mejor de ti. Recuerda siempre que te necesito. Renueva tu ofrecimiento a Mí cada día para que pueda hacer uso de ti como Yo quiera, y crece en fortaleza y estatura.
8 de noviembre
¿Por qué aceptar limitaciones en área alguna de tu vida? Siéntete expandirte en conciencia día tras día. Espera que lo nuevo se desarrolle en ti y ante ti, y si requiere cambios por parte tuya, estate dispuesto a cambiar sin vacilaciones. Si quieres cambiar un programa de radio, tienes que mover el mando hasta encontrar el nuevo canal. Después, has de tener mucho cuidado para sintonizar el canal hasta lograr una recepción clara y que no haya distorsiones que estropeen el programa. Cuando tu deseo de salir de lo viejo sea lo suficientemente grande, no dejarás piedra sin remover hasta que lo hayas logrado. Moverás todos los mandos hasta sintonizarlo con lo nuevo y recibirlo con un volumen audible y de forma clara. Una vez que hayas logrado una recepción clara, a continuación tendrás que estar quieto y escuchar; y una vez que hayas absorbido todo lo que se te transmita, lo siguiente será entrar en acción y hacer algo al respecto. ¿Por qué esperar un solo día más? Sintonízate ahora.
9 de noviembre
Ten una fe firme e inquebrantable. La fe ha de ser vivida y demostrada; no hay que hablar de ella. Al usarla constantemente se hace cada vez más fuerte. No es algo que se coja de la estantería de vez en cuando, para volver a guardarla una vez usada hasta que se necesite la próxima vez. A medida que aprendas a vivir según la fe, aprenderás a verme en todas las personas y en todo lo que está sucediendo, y te darás cuenta de que no hay lugar alguno en el que Yo no me encuentre. Es una conciencia interna de que todo lo mejor de la vida brota desde dentro. Cuando te des cuenta de que lo tienes todo en tu interior, abandonarás esa búsqueda eterna. Dejarás de luchar y de esforzarte por lograr lo imposible, y de una forma callada y confiada encontrarás ese almacén rebosante de tesoros inenarrables. Ahora es el momento de vivir según la fe, no mañana o algún otro día en el que te sientas más fuerte y tengas mayor confianza. Ponla en práctica ahora mismo y mira cómo funciona de maravilla.
10 de noviembre
Día tras día te vas dando cuenta de los desarrollos nuevos en tu interior y en el exterior. Estás absorbiendo nuevas formas e ideas. Tu conciencia se expande y es capaz de aceptar cada vez más. Algunas personas aprenden con mayor rapidez que otras; por tanto, entrar en la Nueva Era no será igual para todo el mundo. Algunas almas serán capaces de dar un salto dentro de ella. Otras entrarán de una forma lenta, asegurándose de cada uno de los pasos que dan al avanzar en su interior. Otras entrarán arrastrándose, y cada paso les resultará doloroso pues muestran resistencia ante los cambios que están sucediendo. Guardan resentimiento ante las formas y las ideas nuevas y querrán que se les deje solas para seguir viviendo como antes, con la actitud de que lo que fue bastante bueno para sus padres y sus madres también lo es para ellas. La respuesta a esa actitud es dejar de luchar contra todo ello y, en vez de eso, sintonizarse y fluir con la vida. Los tiempos están cambiando y lo están haciendo de una forma muy rápida, y a menos que cambies con ellos, te quedarás atrás.