Mensajes recibidos por Eileen Caddy
16 de diciembre
Eres transformada mediante la renovación de tu mente. ¡Qué importantes son estas palabras! Las has escuchado muchas veces, ¿pero qué has hecho con ellas? ¿Qué significado tienen para ti? Toma tiempo para meditar en ellas hasta que se conviertan en palabras vivas y vibrantes en tu vida y te sientas transformada por la renovación de tu mente. Hablas de paz y armonía, del nuevo cielo y de la nueva tierra, de hacer Mi voluntad, de irradiar amor hacia el mundo y de entrar en lo nuevo, ¿pero qué estás haciendo respecto a todo eso? ¿Estás viviendo de modo tal que ayudes a que eso tome forma? No consientas acabar convirtiéndote en un loro, emitiendo palabras que no tengan ningún sentido para ti. Ora sin cesar para alcanzar una comprensión más alta y profunda, da gracias y camina hacia arriba y hacia adelante. Ante todo, vive una verdadera vida y deja que sucedan cosas que transformen tu vida.
17 de diciembre
Cuando estés en contacto conmigo y tu mayor deseo sea hacer Mi voluntad, verás que los actos que hagas no han de hacerse para el yo sino para el bien de todos. Esta vida es solo para las almas completamente dedicadas que estén dispuestas a dejar el yo tras de sí y a formar parte del todo. A la inmensa mayoría de la humanidad no le resulta fácil hacer eso, pues muchas almas no están dispuestas a abandonar su individualidad. Quieren aferrarse a lo que denominan sus “derechos” y hacer exactamente lo que quieran, sin consideración alguna por nadie más. Por tanto, si alguna vez tienes la impresión de que esta vida no es como tu quisieras y te encuentras a disgusto con ella, toma tiempo para averiguar qué es lo que te está originando esta desarmonía en tu interior, pero no busques fuera de ti algún chivo expiatorio al que poder echarle la culpa. Si te das cuenta de que hay algo en tu interior que está causando eso, podrás rectificarlo sin mayor dilación.
18 de diciembre
Cesa de acumular tensión persiguiendo cosa alguna y simplemente deja que las cosas vayan ocurriendo. No permitas que la preocupación te ate ni te mate; aprende, mejor, a depositar todas tus cargas en Mi para poder encontrarte libre para cumplir Mi voluntad y seguir Mis caminos. No puedo usarte si estás tan concentrada en ti misma que “los árboles no te dejan ver el bosque”, así que relájate y suelta. Permanece en quietud y meditando en las maravillas de la vida. Que tu mente quede asentada en Mí. Abre tus ojos, contémplame en todas las cosas y da eternas gracias. Cuando eres capaz de verme en todas las cosas, tu corazón está tan pleno que no puede evitar dar gracias; está, simplemente, lleno a rebosar y se desborda hacia afuera. No se puede ocultar un corazón lleno de amor y de gratitud, pues eso se refleja y queda a la vista de todos. Cuando estás en un estado de gozo y gratitud, atraes a otros hacia ti. A todo el mundo le gusta estar con un alma desbordante de amor, porque el amor atrae amor.
19 de diciembre
Esta es una vida de acción, una vida de cambio. No muestres autosuficiencia, pues cuando incurres en esa actitud, puedes caer fácilmente en una rutina que ocasione como resultado un estancamiento. Tienes que hacer tu propio trabajo espiritual. Tienes que hacer tu propia exploración, a tu manera. Mira dónde se necesita efectuar algún cambio y a continuación emprende la medida necesaria para que ese cambio tenga lugar. Si el cambio es incómodo, cuanto más rápidamente ocurra más fácil resultará. Es mucho menos doloroso quitar un vendaje de golpe que hacerlo poco a poco. Por eso haz lo que tengas que hacer sin perder el tiempo pensándolo dos veces. Da ese salto a lo nuevo sin la menor vacilación, pues tan sólo has de saber que será mucho más maravilloso que lo que has dejado atrás. Con el cambio llega la vida, una vida plena y gloriosa. Se te está ofreciendo. Tómala y da eternas gracias por ella.
20 de diciembre
Busca en primer lugar el reino, ponme a Mí en primer lugar en todas las cosas y todo lo demás se te dará por añadidura. Conoces esas palabras, pero ¿qué estás haciendo con ellas? ¿Las estás viviendo? ¿Ocupan los caminos del Espíritu el primer lugar en tu vida? ¿Tienen más valor para ti esos tiempos que empleas en soledad conmigo que cualquier cosa? ¿Te gusta estar en quietud o te sientes incómoda e intranquila en el silencio? ¿Quieres estar siempre ocupada haciendo cosas y encuentras mucha dificultad en aquietar tu cuerpo y tu mente? Hay millones de almas en el mundo que no soportan el silencio. Tienen que tener constantemente ruido y acción a su alrededor. Son las almas que no conocen el significado de buscar Mi reino ante todo ni de ponerme en primer lugar en todas las cosas. Son intranquilas por dentro y por fuera. Te digo que esos tiempos de paz y de quietud en los que estamos juntos son muy valiosos en un mundo de agitación. Búscalos, encuéntralos y permanece en ellos.
21 de diciembre
Aprende a vivir más allá de ti misma y de tu propia fuerza y capacidad para que las personas que te rodean puedan ver con sus propios ojos que soy Yo quien obra en ti y a través de ti. De esa forma, las almas que no tengan fe y creencia llegarán a conocerme, no por medio de muchas palabras, sino mediante una vida directa y demostrada. Si no vives de ese modo, no estás reconociendo que YO SOY tu guía y compañero y que has dedicado tu vida por completo a Mí y a Mi servicio. Tienes que soltar tus pies del fondo y nadar aguas adentro en lo desconocido con absoluta fe y confianza, sabiendo que no vas a sufrir ningún daño porque YO ESTOY contigo. Nunca llegarás a saber si todo eso es realmente así si no estás dispuesta a hacer algo a ese respecto. Cesa de aferrarte a la seguridad y déjame mostrarte lo que puede suceder cuando te sueltas y Me permites tomar las riendas y utilizarte como quiero.
22 de diciembre
“En la medida que des, recibirás” Estas no son solo palabras. Es la Ley. Cuando la vivas y la pongas en acción, verás lo maravillosamente que funciona. Cuando empieces a dar lo que tienes, comprobarás que se te dará cada vez más. No tengas temor; no te guardes nada, tan sólo da y continúa dando. Un corazón abierto y generoso atrae todo lo mejor hacia sí. Que tu corazón sea abierto y generoso; no te quedes con nada y que el espíritu de la donación esté siempre presente. Comprueba qué es lo que tienes para dar y ofrécelo, sea lo que sea, pues cada don que se ofrece ayuda a completar el conjunto. No esperes que nadie extraiga los dones de ti, sino estate dispuesta a dar lo que tienes. Cuando lo hagas, verás cómo encaja en el conjunto, del mismo modo que la pieza de un rompecabezas, si se coloca en el sitio que le corresponde, completa el dibujo.